Patxi Olazar jugará este sábado su último partido como remontista profesional. Su último encuentro lo jugará junto a Uterga y se enfrentará a su tío Koteto Ezkurra y a Etxeberria III. Una despedida junto a otros tres remontistas de Doneztebe que completarán un estelar totalmente local.
– ¿Cuándo debutó y qué partido jugó aquel día?
– Fu hace trece años, en el año 2003. Recuerdo perfectamente que era el 1 de marzo. Jugué junto a Larrea y nos enfrentamos a Uterga y Urrutia. Ganamos aquel partido 35-29 en el Euskal y también fue el partido de debut para Miguel Mari Urrutia.
– ¿Con qué se queda en estos trece años como profesional?
– Sin duda con las amistades que he hecho. Me voy con muchos amigos y los momentos buenos son incontables. Ha sido maravilloso conocer a gente que me ha aportado tanto. Cuando debuté yo lo hicimos en esas fechas otros seis remontistas como Ion, Agirrezabala, Urrutia… y después he tenido una gran relación con más remontistas.
– En el aspecto deportivo ¿cuál es su mejor recuerdo?
– Las dos finales del Parejas que disputé. Las dos las jugué con mi tío Koteto y en la primera perdidos contra Zeberio II-Auzmendi y la segunda la perdidos contra Urriza y Barrenetxea IV. De una a otra pasaron unos cuantos años.
– ¿Se te ha quedado alguna espina clavada?
– Pues quizás el quedar tan cerca de la txapela y no haber podio ganarla. Aunque si que he ganado otros títulos en torneos menores al Campeonato del Parejas.
– ¿Ser el sobrino de Koteto Ezkurra ha sido una losa o le ha beneficiado?
– Siempre es difícil ser el sobrino de un mito como él, pero en mi caso ha sido positivo. Me ha ayudado mucho y siempre me ha aconsejado bien.
– Has conocido la evolución del remonte en los últimos años y los años más difíciles. ¿Ha cambiado mucho?
– Por fortuna los peores momentos ya pasaron y se ha podido enderezar el rumbo después de que incluso se cerraran Galarreta y el Euskal. Lo que más ha cambiado es precisamente que ahora solo jugamos en Galarreta y ya no en el Euskal. Antes había más partidos y el cuadro era más amplio. Eso ayudaba a que fuera más a meno, ya que jugar siempre en el mismo frontón no es lo ideal. Otro de los aspectos que he notado que ha cambiado es que antes las categorías estaban muy definidas entre las figuras, los que jugaban terceros partidos y los que estábamos jugando primeros y cuartos partidos. Había una jerarquía que ahora ya no es tan clara.
– El sábado le despiden en un estelar con tres remontistas del pueblo.
– Así es. Será especial. En principio tenía que jugar Agirrezabala con quien he compartido toda mi vida como remontista desde aficionados hasta ahora, pro no ha podido ser y al final jugaremos cuatro pelotaris de Doneztebe. Después del partido iremos a cenar al pueblo y el sábado acudirán a la despedida toda la familia y mis amigos. Será un momento emocionante.